¿Qué hacer si mi ser querido fallece fuera de la ciudad y requiere ser trasladado?
En esta guía, te brindaremos información útil y pasos prácticos para enfrentar esta difícil situación con la debida diligencia.
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Los términos que se utilizan en las funerarias pueden ser variados y, algunos, difíciles de distinguir entre sí, creando confusión en el público en general cuando tiene que hacer uso de estos servicios.
Es importante conocer la diferencia entre cada uno para así darle el homenaje que se merece a la persona que haya fallecido, sin más confusiones entre los términos. De esta forma es más fácil cumplir los últimos deseos del ser querido o de elegir la ceremonia que más se adecue, según las creencias o religión de la familia.
En Grupo Arriaga te diremos en qué se diferencian los velatorios, tanatorios y funerales, además de en qué consiste cada uno.
Se refiere a una reunión íntima entre las personas allegadas, que se lleva a cabo antes de la inhumación. El objetivo de estas reuniones es que los familiares y seres queridos del fallecido se reúnan para poder despedirse, puedan brindarse apoyo y consuelo, en un sitio pacífico.
Estos sitios pueden hacer referencia a las salas del tanatorio donde se vela al ser amado. Estas salas están acondicionadas con todas las medidas de seguridad higiénicas y sanitarias necesarias, con el fin de proteger a los visitantes.
También en los velatorios se realizan oraciones y se honra la memoria del ser querido, dedicándole palabras de respeto y amor. Generalmente, esta ceremonia va acompañada de ornamentos florales, como coronas, ramos, etc., como una forma de adornar su despedida o rendir un lindo homenaje.
Después de los velatorios se lleva a cabo el traslado para la inhumación o la cremación.
Este es un local, establecimiento o edificio funerario donde se realizan los velatorios; está adaptado de tal forma para que se pueda realizar la exposición del ser amado, que se realiza antes de la inhumación.
Los tanatorios cuentan con distintas dependencias, como las zonas para preparar el cuerpo, los velatorios, cámaras (donde se almacenan los implementos: urnas, ataúdes, etc.) y una habitación refrigerada que conecta con la sala del velatorio, para llevar a cabo ese difícil momento de la forma más cómoda posible.
Además, los tanatorios suelen ofrecer servicio de venta de ataúdes, féretros, urnas y arreglos florales.
Estos sitios son mucho más recomendables que velar al ser querido en el hogar, debido a su practicidad y el espacio con el que cuenta. En los hogares puede ser incómodo, sin mencionar que podría propiciar alguna enfermedad a las personas que están presentes.
Este servicio es relativamente moderno, se implementó hasta la década de los 70, mejorando los servicios funerarios de hoy en día. Antes, los velatorios tenían que realizarse en los hogares.
Sus propósitos son similares a los del velatorio, como el de acompañar a la familia y personas cercanas al fallecido, para velar el cuerpo en su partida.
Los tanatorios y velatorios pueden sonar como «lugares», los sitios donde estará el ser amado y los familiares, pero la principal diferencia radica en que el tanatorio es donde se va a preparar el cuerpo, para luego exponerlo, mientras que el velatorio es el espacio acondicionado para que los familiares y amigos velen a su ser querido.
Este término se confunde mucho con los velatorios, pero son diferentes en esencia; los funerales tienen un sentido más religioso. Se trata de un ritual o ceremonia religiosa que se realiza para honrar la memoria y el alma de la persona fallecida, para despedirlo con amor y respeto.
Este no es un sitio como los dos anteriores, sino que es un conjunto de ceremonias dedicadas al fallecido, previo a la inhumación o cremación, y dependen de diversos factores como la religión, costumbres, creencias y hasta la posición social del ser querido.
El velorio se trata de un formato de puertas abiertas donde las personas cercanas al fallecido pueden llegar a despedirse en distintos horarios al sitio asignado, ya sea el hogar o en un tanatorio.
Otra diferencia clara entre velatorio y funeral es que el velorio se trata de una celebración donde los presentes comentan recuerdos y anécdotas, conversan, se consuelan y recuerdan a su ser amado. Es un evento un poco más informal, donde el féretro del difunto puede estar o no presente.
El funeral es una hermosa forma de reconocer, honrar y celebrar la vida de un ser querido que falleció.
Conociendo las diferencias entre estos términos, será más simple elegir las características de esa última despedida, ajustando las posibilidades económicas de cada familia, para contratar un tanatorio con velorio o funeral.
La decisión es personal e íntima de cada familia; no hay una forma única de despedir a un ser querido, así que se puede elegir un velorio para recibir las condolencias en general, y luego una reunión de familiares y amigos cercanos para recordarlo y celebrarlo con amor.
